martes, 7 de agosto de 2012

Joyas en el Cantábrico I.

Hola de nuevo!, espero que esteis disfrutando de este verano a pesar de las famosas ‘primas de riesgo’, ‘Bancos centrales’, ‘bajadas de sueldo’, etc, etc. Yo, por mi parte, he tenido un Julio duro(perdón por tener un poco abandonado el blog) pero intentaré recuperarme en las 2 semanas de asueto que tengo.

Si en la entrada anterior hablaba de soluciones low cost, en esta voy a irme a algo en otra linea……no sólo de penas vive el hombre(y la mujer, claro..;-)

Propongo ¡3 restaurantes 3!, cerca o muy cerca de ese Mar Cantabrico con el que he crecido en mis veranos y que tanto me gusta. Los 3 eran nuevos para mí(cosa imperdonable en 2 de ellos), pero dicen que nunca es tarde si la dicha es buena y en este caso es extraordinaria.

Haré 2 partes para que la entrada no sea muy larga. En esta primera pondré 2 sitios de Cantabria, uno ‘en pañales’, sólo llevan meses; el otro, uno de los pesos pesados a nivel nacional con muchos años de experiencia.

En cuanto a la segunda parte….os dejo con suspense, es demasiado grande para anunciarlo.

Espero que disfruteis.

La Nueva Torruca. (Quijas-Cantabria)

Si bien la primera opción(en lo que al vino se refiere) de esta zona occidental de Cantabria sería Casa Cofiño, autentica casa de comidas (en el bucólico pueblo de Caviedes) donde los propietarios tienen un ‘serio problema’ con el vino(el local está literalmente plagado de neveras con botellas) pudiendonos acercar a ver parajes como estos…



Rias de Tina mayor y Tina menor


….pero quiero romper una lanza por esas sorpresas que te encuentras en un sitio casi ‘de carretera’ cerca del famoso (y ya malogrado por el turismo) Santillana del Mar.

Hablo de gente joven y preparada que, en plena crisis, luchan con ilusión y talento para sacar su negocio adelante. Dese estas lineas os deseo lo mejor.

Ya había leido algo en la red sobre este sitio y además me pillaba de camino, por lo que decidí probar. Hablaban de menú degustación(40€ sin vino), con fotos de platos bien elaborados/presentados de cocina ‘moderna’ para lo que se estila en la zona….pués bien lo confirmo, lo ratifico y lo recomiendo. Aquí estan las pruebas del delito…











Empezamos por una espuma de Martini bianco, después el foie, luego una sorprendente interpretación de huevos con papas y jamón, siguió un ajoblanco exquisito, un escabeche de atún con cebolla caramelizada, una purrusalda, el excelso cogote de merluza y almejas, una crujiente papada de cerdo con hongos y una crema de café en taza,(no pongo todas las fotos porque fueron bastantes platos).

Para llevar sólo unos meses tienen una magnifica RCP(40€ + bebida)y un excelente trato al comensal. Deberán de prestar más atención a la carta de vinos(ahora es corta, pero valiente!)… esto tiene fácil arreglo.


La Cigaleña. (Santander)

Pegada a la plaza de Cañadío, centro de la marcha en Santander, en la fachada de este local reza ‘Bodega y Museo del vino’. Cuando entras, efectivamente, parece que has retrocedido en el tiempo, con una cocina tradicional sin pretensiones y con buenas materias primas



Sitio con mucha historia a sus espaldas y al que le imprime su personalidad la figura de su maitre/sumiller(con una cara de buena persona que tira de espaldas) Andres Conde, gran conocedor de vinos y profesional como la copa de un pino. También mencionar, como no, al equipo de camareros con muchas tablas, amables, eficaces y atentos.

Andrés se vuelca por completo en guiar y satisfacer al comensal. Si además, como es mi caso, compartes gustos al ver una carta de vinos MUY TRABAJADA y que puedo calificar de completa, equilibrada, actualizada y a precios razonables… que quereis que os diga, me puse en sus manos.

Dicho y hecho, elegí el menú de la bodega(entrante, pescado, carne y postre) con los vinos que él creyera convenientes después de darle yo alguna pista de lo que me apetecía. Este fue el resultado….






El recorrido fue con vinos de Jura(fantástico), Ladoix(Borgoña elegante y sorprendente), Loira, Monbalzillac sublime y Sauternes contundente. Correspondidos con torta de queso Pascualete, bacalao al pil-pil, solomillo, tiramisú y buen café respectivamente.
Espectaculo de sensaciones y disfrute de la mano del 'maestro' por 59€.

Andres me despidió diciendo: ’la proxima vez ven con más tiempo, entras sobre la 1.30 y sales sobre las 6’, ahí queda eso!….. como toma de contacto, la verdad es que las casi 3 horas que allí pasé se me pasaron volando…
Doy gracias por conocer gente así, con la que vives experiencias dificiles de olvidar y con las que tienes una empatía desde el minuto 1.

Espero que os sea de ayuda.

Feliz verano!

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